10 de diciembre de 2012

Cuando duermo

Palpita mi corazón desnudo en la oquedad de mi cráneo. Suenan tambores en las membranas de mi pecho; sonidos de guerra que, entre calma y calma, desatan tormentas de suelo a techo; tronar de bombo y caja a ritmo procesional de viernes en luto; bombeo cadente en los callejones que enmarañan mi cuerpo, regando con rojos nazarenos de paso sereno.  Su tiritar resuena en el cuello , y zigzaguea entre las montañas de la nevada almohada, como el inquieto eco que busca su muerte en espacio abierto.

Jandro Güell.

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